“Conejo”

  • 25 julio, 2014

“Conejo” a la restricción de pólvora en Bogotá

Las poblaciones vecinas montan la distribución en Bogotá.
En pocas horas es posible realizar un pedido de pólvora sin los debidos permisos en Bogotá.
Según el Distrito, el 50% de los casos de lesiones por quemaduras se concentraron en las localidades de Bosa (seis casos) y Ciudad Bolívar (cuatro casos).
De los casos de quemados registrados, 14 casos (70%) correspondieron a menores de 18 años de edad y los 6 restantes (30%) a mayores de edad.

El Concejal Felipe Rios logró establecer la forma en que opera una de las redes de distribución de pólvora en Bogotá sin los permisos requeridos. En tan sólo un par de horas se establece el contacto y la entrega a domicilio en Bogotá o en alguno de los puntos establecidos por los distribuidores que son regularmente en las localidades de Ciudad Bolívar o Bosa.

Los pedidos se realizan contemplando mínimos conocidos en el medio como “fresas” para el caso de la investigación se consiguieron chispitas, potes de fuego, volcanes pirámide, Rositas chinas, Pitos, mechas, voladores, martillos, culebras, tortas, crisantemos entre más de 20 opciones de pedido.

La campaña «Enciende la vida, apaga la pólvora», que en días pasados fue lanzada por la Alcaldía Mayor de Bogotá en un esfuerzo por llevar los indicadores a cero, tras un decrecimiento histórico desde 1995 cuándo la prohibición comenzó en la capital con registros de más de 250 quemados a menos de 30 en la temporada decembrina.

Las multas que hoy se imparten por contravenir el código de policía en este aspecto van de 40 a 50 salarios mínimos diarios vigentes, sanciones que al parecer no logran disuadir a los infractores. Por esta razón el Concejal Felipe Ríos tras comprobar en video la forma en que operan los distribuidores de pólvora realizará mañana martes 10 a.m. una rueda de prensa donde entregará a la Policía Metropolitana la pólvora resultante de esta investigación, los videos y audios que la soportan además de copia del proyecto de acuerdo radicado donde propone endurecer las sanciones a quienes fabriquen, comercialicen, almacenen, transporten o manipulen pólvora con 150 a 200 salarios mínimos diarios vigentes.

Con el fin de reducir y evitar que más niños sean afectados gravemente por el indebido uso de la pólvora, la Administración Distrital lanzó la campaña “El que anda con pólvora algo se le quema”.

La sensibilización a la comunidad sobre lo peligroso que resulta ser el uso de la pólvora, pretende que ningún niño sufra alguna lesión, resaltando que está prohibida su venta, comercialización y uso en cualquiera de sus formas, anticipándose de esta manera a la prevención de tragedias con el fin de tener una feliz navidad.

El llamado se hace a los padres de familia y a todos los comerciantes formales e informales para que no comercialicen esta clase de mercancía en la ciudad, haciendo exhaustivas revisiones y decomisos a quienes hagan caso omiso de la manipulación de pólvora.

El Alcalde Mayor fue enfático en argumentar que aquellos padres que dejen manipular a sus hijos pólvora podrían llegar a perder la patria potestad de sus hijos y de paso hacer que sigan disminuyendo los índices de menores quemados.

El Concejal de Bogotá Felipe Rios espera que los bogotanos tomen conciencia del riesgo que implica la manipulación de estos juegos artificiales y se sigan disminuyendo las cifras de quemados en la ciudad, como sucedió el pasado año que sólo se reportaron 20 casos en comparación al 2004 donde se permitía el uso de la pólvora, el cual tuvo 204 lesionados.

MAYORES INFORMES
JUAN CARLOS AVELLANEDA
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